En las últimas décadas, se ha observado un progreso notable en la reducción de la brecha de género, sin embargo, todavía nos separan 131 años para darle un cierre real. Las brechas de género representan una limitación significativa en cuanto a las posibilidades de innovación y de adopción de nuevas perspectivas para abordar los desafíos contemporáneos y futuros.
¿Cuáles son los métodos idóneos para subsanar esta problemática? Para Ana Elena Castillo, miembro representativo de la red de género de EY Centroamérica, Panamá y República Dominicana,dada la arraigada naturaleza del tema, no existen soluciones de carácter mágico que permitan resolver la problemática. No obstante, explica que la implementación de acciones específicas puede contribuir gradualmente a su resolución.
- Incorporación de cambios en la normativa legal que incentiven que tanto el hombre como la mujer tengan y hagan uso de medidas de conciliación de su vida laboral y profesional. Por ejemplo, la extensión de permiso de paternidad.
- Incorporación de políticas de diversidad e inclusión en las organizaciones.
- Participación paritaria en los procesos de selección de posiciones directivas (50% hombres, 50% mujeres)
- Procesos de selección y promoción anónimos.
- Sensibilización continua sobre diversidad e inclusión en las empresas e instituciones educativas.
Un vistazo a la brecha profesional
De acuerdo con el Reporte Global de Brecha de Género del Foro Económico Mundial, publicado en el 2023, América Latina y el Caribe ocupan el tercer lugar entre todas las regiones, en términos de brecha de género, después de América del Norte y Europa. En nuestra región, se observa una mejora notable, impulsada principalmente por el empoderamiento político, seguido de la participación y oportunidades económicas.
Guatemala tiene una brecha del 65,9%. Con ese porcentaje, no solo se sitúa en el puesto 117 del ranking de 146 estados que forman parte de la medición, también ocupa el último lugar del ranking regional, entre los 21 países de Latinoamérica y Caribe que conforman el estudio.
Como parte del cambio, un número creciente de empresas se ha sumado a esta necesidad, destacando entre ellas “Women. Fast Forward”, una plataforma desarrollada por EY para la promoción de la igualdad de género en el mundo de los negocios, mediante tres pilares:
- Mujeres en los negocios: buscando enfatizar en tener una mayor participación de las mujeres en puestos de liderazgo. Para ello, se apoyan en la iniciativa mundial denominada El club del 30% donde diversos estudios indican que, si hubiese una participación del 30% de mujeres en posiciones de liderazgo, podría incrementar hasta en un 6% el margen neto de utilidades en las empresas.
- Mujeres en la tecnología: donde a través de diversas alianzas estratégicas se busca incentivar una mayor participación de niñas y jóvenes que estudien y se preparen en carreras STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería, Matemáticas).
- Mujeres emprendedoras: pilar mediante el cual se busca la generación de alianzas con mujeres que están iniciando sus negocios o sus emprendimientos, para crear redes de sororidad, networking y una red de proveedores diversos que estén alineados a contribuir con cerrar la brecha de género.
De esta forma, se busca potenciar una fuerza laboral diversa permitiendo a mujeres y niñas alcanzar su potencial mediante educación, tutoría, innovación y oportunidades empresariales.
Es imperativo que tanto las empresas como gobiernos continúen trabajando juntos para promover un futuro más equitativo y justo para las personas, creando una fuerza laboral que apoye el cierre de la brecha de género y fomente un entorno donde todos puedan convertirse en arquitectos de la era de la transformación.