La neurodivergencia es una realidad que ha ganado visibilidad en los últimos años, destacando la importancia de comprender y valorar las diferentes formas en que los cerebros humanos pueden funcionar.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que aproximadamente el 15% de la población mundial vive con alguna forma de discapacidad, y muchos de estos casos se relacionan con cerebros neurodivergentes. Según esta organización, el diagnóstico y la identificación temprana son cruciales para proporcionar el apoyo adecuado.
Laura Vargas, orientadora de Kumon en Guatemala, explica que la neurodiversidad se refiere a todos los tipos de configuración neuronal que existen. Según la experta las personas neurodivergentes incluyen aquellas con diagnósticos, como: Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), Trastornos del Espectro Autista (TEA), dislexia, dispraxia y otros perfiles cognitivos que se desvían de las normas “neurotípicas”.
Prevalencia de neurodiversidad
Vargas asegura que el mundo es neurodiverso porque todos tenemos diferentes conexiones neuronales; no obstante, la OMS, en base a diversas investigaciones, proporciona los siguientes datos:
- Aproximadamente 1 de cada 100 niños a nivel mundial tiene diagnóstico de Trastorno del Espectro Autista, y el mismo suele diagnosticarse en la primera infancia.
- La prevalencia del TDAH varía según las regiones, se estima que afecta aproximadamente entre 5% y 7% de los niños en edad escolar a nivel mundial.
- La dislexia es una de las dificultades específicas del aprendizaje más comunes, afecta entre 5% y 10% de la población mundial.
La educación y las personas neurodivergentes
La orientadora indica que las personas neurodivergentes experimentan el aprendizaje de manera única y requieren enfoques educativos que respeten y potencien sus fortalezas. “Es fundamental que los padres de familia tengan acceso a las herramientas y recursos adecuados para apoyar el aprendizaje de sus hijos; por lo que en el Centro Kumon siempre les Invito a que se informen y se conecten con estrategias efectivas que faciliten el desarrollo educativo y emocional de sus hijos”, compartió Vargas.
Expertos aseguran que los estudiantes neurodivergentes tienen necesidades diferentes a la hora de estudiar, por ejemplo, pueden necesitar más tiempo para dominar ciertos conceptos o, por el contrario, avanzar rápidamente en áreas donde demuestran un mayor interés o habilidad. Es por lo que Vargas comparte algunos consejos prácticos para los padres de familia, referentes a cómo ayudar a sus hijos neurodivergentes a tener éxito en su educación:
- Conoce las fortalezas de tu hijo: es fundamental que los padres identifiquen y comprendan las habilidades y fortalezas únicas de sus hijos. Muchos de los niños neurodivergentes pueden sobresalir en áreas específicas, como las matemáticas, la creatividad o la resolución de problemas. Por lo que aprovechar esas fortalezas y brindarles la oportunidad para que brillen puede aumentar su confianza y motivación.
- Establecer una rutina diaria y crear un ambiente de estudio cómodo: los niños neurodivergentes suelen beneficiarse de la consistencia. Establecer una rutina predecible para el estudio y las actividades diarias les proporciona un entorno más estructurado, lo cual reduce la ansiedad y les ayuda a concentrarse mejor. Además, asegurarse de que el espacio de estudio sea tranquilo, ordenado y libre de distracciones. Algunos niños son sensibles a estímulos como el ruido o el desorden, por lo que un ambiente calmado facilitará su concentración.
- Ajusta el ritmo de aprendizaje y promueve la independencia: permitir que tu hijo aprenda a su propio ritmo es clave. Como padre, es importante evitar comparaciones con otros niños y celebrar los logros individuales, que cada día se reten a ellos mismos. También es importante fomentar la independencia desde una edad temprana para que los niños desarrollen autoconfianza y habilidades para la vida.
- Fomenta el descanso y movimiento: los estudiantes neurodivergentes, en especial aquellos con TDAH, pueden beneficiarse de pausas regulares y oportunidades para moverse. Sesiones cortas de estudio y descansos breves para estirarse, caminar o hacer una actividad física pueden marcar una diferencia en los procesos de aprendizaje.
La orientadora concluye que estos consejos no solo refuerzan el éxito académico, sino que también promueven un entorno emocionalmente saludable y positivo para los niños neurodivergentes; con paciencia, comprensión y las herramientas adecuadas los padres pueden ayudar a sus hijos a alcanzar su máximo potencial”.
Método Kumon: aliado en la educación de niños neurodivergentes
El Método Kumon ofrece un enfoque que, por su naturaleza personalizada, es especialmente adecuado para estudiantes neurodivergentes; pues permite a cada alumno avanzar a su propio ritmo, lo que reduce la presión asociada al aprendizaje en entornos tradicionales, donde se espera que todos sigan un mismo ritmo.
Vargas explica que con el Método Kumon se favorecen las conexiones neuronales que ayudan a la atención, concentración y habilidades ejecutivas, las cuales son útiles en cualquier entorno educativo. “El uso de materiales progresivos y escalonados facilitan el desarrollo de habilidades de manera gradual, asegurando que los estudiantes no se sientan abrumados por conceptos demasiado avanzados antes de haber construido una base sólida”, agregó la experta.
La orientadora asegura que el método ofrece a los padres de niños neurodivergentes una alternativa efectiva y personalizada para potenciar las habilidades académicas de sus hijos, “invitamos a las familias a descubrir cómo este enfoque centrado en el estudiante puede hacer una diferencia significativa en el aprendizaje y desarrollo de sus hijos. Sé que juntos, podemos construir un futuro más inclusivo y brillante para todos”, puntualizó.