La nube sigue evolucionando a gran velocidad marcando nuevos comportamientos en su oferta y demanda, de modo que estar pesando en si estar o no en ella, ya no es una opción. Para cualquier empresa que esté en búsqueda de innovación para sus clientes finales, así como ahorrar costos, la nube es la vía para hacerlo. El mundo actual ya es adicto a la inmediatez, elasticidad en la oferta de servicios y disponibilidad desde cualquier punto. Estos atributos serán difíciles de lograr con una infraestructura tradicional, por lo que es importante que las empresas que se decidan por la nube, preparen a su personal y adecúen procesos para un exitoso proceso.
“El primer paso que GBM recomienda para iniciar su proceso de migración de datos a la nube es comprender realmente los objetivos del negocio. Con esto claro, se determina el estado actual de la infraestructura y capacidades tecnológicas. Con esos insumos se construye una hoja de ruta que nos permite ir a la nube de forma ordenada y al ritmo que la organización necesita para dar espacio a una madurez superior”, explicó Eric Arosemena, Gerente Regional de Nube Híbrida de GBM.
“Es importante considerar la asesoría de un socio tecnológico con experiencia al que podamos transmitir cuáles son nuestros objetivos. Una vez realicemos todos los pasos mencionados el resto será seguir un gran plan maestro con actividades técnicas y nuevos procesos. Podemos iniciar con planes pilotos y de ahí crecer en alcance y complejidad”, agregó el experto. Gracias a su experiencia en el área de nube, GBM ha identificado tres rutas para estar en la nube por las cuales las organizaciones pueden optar: migrar, modernizar e innovar. El camino a seguir depende del tipo y objetivos de cada empresa.
¿Migrar, modernizar o innovar?
Antes de iniciar con este proceso de transformación hacia la nube, GBM recuerda que es importante que las organizaciones cuenten con una infraestructura base requerida para una migración exitosa a la nube que contemple:
- Red de Comunicaciones: el acceso a los datos y sistemas debe contar con el desempeño requerido y ofrecer las opciones de movilidad para así agilizar al negocio. La arquitectura de red será clave para la flexibilidad que su negocio requiere.
- Seguridad de la información: Al cambiar a un entorno de nube es indispensable planificar y adecuar los sistemas y controles de seguridad de los datos. Actualmente hay diversidad de opciones (“as a service”) para mantener y atender eventos de seguridad según cada necesidad.
- Disponibilidad de la información: La información no disponible es igual a no tenerla. La continuidad del negocio siempre es un factor a considerar en cualquier arquitectura de nube. Desde lo básico como el respaldo de datos hasta la construcción de ambientes redundantes mantienen el balance entre el riesgo y la ganancia que su empresa puede manejar.
Una vez que la empresa cuente con esta infraestructura y tenga sus objetivos de negocio claros, GBM podrá guiar a la organización a seleccionar la ruta más adecuada para su empresa. La migración es en ese sentido la primera ruta, la cual aplica para todas aquellas compañías que aún no dan el paso para migrar sus cargas de trabajo a la nube, motivados por la reducción de costos de infraestructura de tecnología. Una industria candidata bajo este proceso bien podría una empresa de manufactura o una maquila, entre otras.
La modernización, por su parte, es la segunda ruta. Esta vía es la adecuada para empresas que ya tienen un cierto porcentaje de cargas de trabajo en la nube, pero que requieren ampliarse en sus capacidades cloud para obtener agilidad del negocio y participar de ecosistemas digitales. Esto podria ser desde una compañía aseguradora, hasta una de servicios.
Por último, una tercera ruta es la innovación, camino dirigo especialmente a aquellas empresas que deben estar dentro de un ecosistema completamente digital por lo competitivo del sector. El fin de este camino es crear nuevos modelos de negocio, experiencias al usuario y productos digitales. Dentro de esta ruta podrían situarse bancos, compañias financieras y las fintechs en general.
Seguir una ruta correcta y adecuada para el tipo y necesidades de la organización le permitirá a las empresas aprovechar las múltiples ventajas tecnológicas que ofrece la nube, las cuales bien aplicadas y administradas ofrecen una serie de beneficios al negocio tales como llegar a los clientes finales de una forma mucho más ágil, permitir que los clientes acceden a los servicios y productos de la empresa donde quiera que estén, en lugar de obligarlos a mantenerse en un solo lugar la mayor parte del tiempo, enfocar el foco de negocio de la empresa en las iniciativas de negocio dejando de lado el mantenimiento de infraestructura física y otras operaciones que se dan por sentadas en la nube así como un ahorro de costos y tiempos.
GBM cuenta con casi dos décadas de experiencia en la nube apoyando a clientes a diseñar, migrar y administrar nubes privadas, públicas e híbridas. Con más de 9 centros de datos ubicados en Centro América y Reública Dominicana, además de contar con arquitectos certificados en las nubes IBM Cloud, Microsoft Azure, AWS y Google Cloud, GBM representa al socio de negocios más completo de la región. Su oferta incluye servicios básicos de nube como procesamiento, respaldo y monitoreo hasta consolas de administración multinube, contenedores, inteligencia artificial, IOT y Security Operations Center (SOC).